¿Qué es la motivación?
Es el impulso que mueve a las personas a hacer algo o a comportarse de determinada manera. Es esa fuerza que moviliza, que provoca deseos de actuar. Es el desafío de la tarea, la oportunidad de crecimiento y de avance, la satisfacción por aprender y progresar.
Tres fuentes de motivación:
- Biológica: satisfacer nuestras necesidades biológicas, como el hambre, la sed y el deseo sexual. Es el impulso más bajo que responde a la necesidad de supervivencia.
Imagínate sumergidos en el agua durante 3 minutos sin respirar ¿será que estarás motivado a salir? ¡¡¡Creo que sí!!!! Pensemos por un momento en nuestro postre favorito, tal vez chocolate, dulce de leche, fresas con crema o browning con helado ¿comienzas a salivar con tan solo imaginarlo? ¡¡¡sí!!!! El deseo biológico puede ser un fuerte impulso que nos mueva a actuar.
- Externa: aquello que nos hace reaccionar y actuar cuando nos prometen una recompensa o nos amenazan con un castigo.El diccionario de la Real Academia Española define a la recompensa como: «Retribuir o remunerar un servicio. Premiar un beneficio, favor, virtud o mérito», mientras que, el castigo lo definió como «pena que se impone a quien ha cometido un delito una falta».
El sistema castigo y recompensa, es una fuerza que moviliza a millones de personas alrededor del mundo. ¿Recuerdas cuando tus padres te decían: si haces la tarea puede salir a jugar? o por el contrario, ¿Si no haces la tarea tienes prohibido ver televisión? Todos en algún punto de nuestras vidas actuamos por las motivaciones externas.
Ahora bien, las investigaciones de los psicólogos del comportamiento humano han observado que los factores externos que mueven a la gente a la acción, como el sistema de premios y castigos, se vuelven contraproducentes. ¿Por qué? Porque a la larga, transforma una actividad divertida en un trabajo obligatorio.
Por ejemplo: el niño que le gusta tocar piano y lo hace por el placer de hacer música, hasta que sus padres lo inscriben en un conservatorio y comienzan a demandar mayor concentración, amenazan con suspender los juegos y la diversión en caso que no practique sus lecciones de piano. La actividad pasa Pasa de ser placentera a obligatoria y su nivel de motivación disminuye.
La estrategia de premio-castigo puede ser eficaz en el caso de tareas muy rutinarias; como el embalaje en bolsas en el supermercado; donde las recompensas hacen que los empleados trabajen más eficientemente. Si el trabajo es más exigente, si requiere más creatividad, la promesa de recompensa o castigo puede conducir a un comportamiento éticamente incorrecto y a una disminución en el rendimiento.
- Interna: Fue después de mediados del siglo XX, que los estudiosos del comportamiento humano comenzaron a hablar de la motivación intrí ¿Qué es? la que existe cuando hacemos cosas porque sentimos alegría, felicidad y satisfacción. Se vincula con el placer de completar o dominar una actividad.
Tres pilares de la motivación interna.
El autor Daniel H. Pink en su libro Drive, presenta los “tres pilares de la motivación intrínseca» que todo emprendedor debe conocer para optimizar los logros de su organización: «autonomía, maestría y propósito».
- Autonomía: En lo profundo de nuestro ser deseamos dirigir, expandir nuestras capacidades y ser protagonistas de nuestras propias vidas. La autonomía, supone manejar las cuatro decisiones: 1) lo que hace, 2) cuándo lo hace, 3) cómo y 4) con quién lo hace. Les narro el ejemplo de Google: en lugar de vigilar a los empleados y mantenerlos bajo un régimen de estricto control, han soltado las riendas permitiendo que los trabajadores se autorregulen. Dependen de la auto-organización individual del tiempo del trabajo. Por ejemplo: los empleados pueden dedicar el 20% de su tiempo a desarrollar sus propias ideas innovadoras. El éxito de esta estrategia de motivación habla por sí mismo.
- Dominio (Maestría): Las personas que buscan el dominio de una habilidad o actividad, disfrutan del proceso. Realmente se entusiasman en llegar a ser buenos en algo, en especial cuando el desafío requiere esfuerzo, pensamiento, prá Cuando alguien logra el dominio de una habilidad, seguramente encontrará el éxito. Dominio y éxito van de la mano, y se disfrutan porque en el camino se vivió el desafío y el esfuerzo. Algunos ejemplos de dominio son: Miguel Angel, Leonardo Da Vinci, Steve Jobs, entre otros.
- Propósito: Es la principal fuerza impulsora del ser humano. Existen miles de organizaciones con actividades voluntarias y no remuneradas. En muchos casos, tener un propósito es más motivador y activador de lo que puede ser el dinero. Se ha comprobado también, que el bienestar de los trabajadores mejora en las empresas que destinan una parte del presupuesto a causas benéficas.
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